13 de octubre de 2013


 
 
 
Todos hablamos del amor
Otros aman y otros son amados
y a cada uno nos toca
nos amen o no...
 

Unas amamos hasta nuestros limites superar
y las demás dejarnos amar
pues es diferente amar
y dejarse amar,
Pues amar nos inspira a dar todo y más; dejarse amar es abrirnos a la oportunidad de abrir el alma y confiar...

El amor más grande
amando o dejandose amar;
es el que se siente en el alma, deleita el espíritu,
supera los retos de la cotidianidad,
disfruta los detalles más simples y los momentos de intimidad
sin  los porqués
que nos faltan por contestar
y en vez de separarnos
nos unen más...

Es el que nos hace grande
cuando se comparte
amando a alguien
y se vuelve inmenso
cuando ese alguien
nos ama sintiéndonos
su ser más importante
pudiendo reciprocarle...

Así amo yo y fue un compromiso sellado en el cielo,
en un contrato sagrado
teniendo como único
testigo a Dios permitiéndome ofrecerlo y recibirlo de aquellos
que aman y dejan amarse
a su manera como nos ama Dios.